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La Universidad Nacional del Litoral (UNL) entregó esta mañana la máxima distinción de Doctor Honoris Causa al Dr. Bernardo Kliksberg. El acto se llevó a cabo a las 11 en la sala del Consejo Superior, ocasión en la que Kliksberg también brindó la conferencia magistral que se dicta luego de recibir el máximo honor universitario bajo el título "La Misión de la Universidad en la Argentina de Hoy". "Me siento muy honrado por estar en Santa Fe, una tierra histórica para el país que tiene tanta significación y por recibir esta distinción de una Universidad que es la primera hija de la reforma universitaria de 1918", expresó Kliksberg. "Esta es una universidad que tiene un legado glorioso y que hace todos los días un trabajo de primera calidad por el país y por la gente", continuó.La distinción fue entregada por el vicerrector Amadeo Cellino quien afirmó: "Como acto institucional nos llena de orgullo, entre otros aspectos sustanciales, porque nos permite potenciar y sublimar las convicciones que animaron los aportes éticos, académicos y profesionales de una persona cuya entrega exhorta y compromete a la construcción de una civilización más justa y humanizada".Asimismo, Cellino recordó la sentencia que acompaña el efebo de la Universidad Nacional del Litoral, "luz que no se extingue", al que comparó con el espíritu que resume la obra de Kliksberg, "sobre todo porque en sus aportes se proyecta mucho más que la lucidez de un notable pensador, la riqueza diagnóstica de un intelectual de reconocida agudeza, o la impronta profesional de un emprendedor incansable: en sus desarrollos se perfilan los sueños pendientes de una humanidad que necesita superar una crisis que ahoga y ensombrece su destino".Además participaron del acto, el rector en uso de licencia Ing. Mario Barletta, el diputado nacional Hermes Binner, autoridades universitarias, provinciales y público en general..La vigencia de la Reforma del 18En su alocución, Bernardo Kliksberg comenzó recordando la gesta de la Reforma Universitaria de 1918, afirmando que se anticipó 50 años al Mayo Francés y que desde éstas tierras de América Latina y de Argentina se lanzó una serie de manifiestos a la opinión pública que implicaba abrir las puertas de la universidad, tener el gobierno universitario todos los actores de la universidad, etc. "Esto dejó una marca imborrable en la historia argentina y latinoamericana y si algo esperan de nosotros aquellos hombres es que la reinterpretemos y la apliquemos en la realidad actual", indicó.Sin embargo, el flamante Doctor Honoris Causa fundamentó que si bien muchos de los puntos centrales de la Reforma fueron llevados a cabo, lo fundamental no se cumplió: "La promesa central de abrir las puertas de la universidad no se cumplió, el desafío sigue absolutamente intacto en lo central. Lamentablemente en el año 2007, 1 de cada 100 muchachos de los sectores más pobres de la población se gradúan en la universidad". Esta situación se da en el contexto de América Latina, que según sentenció Kliksberg, constituye "la región más desigual de todo el planeta"; y que justamente pobreza y desigualdad no son entidades que funcionan disociadamente, sino que "hay pobreza porque hay desigualdad". En este sentido, ejemplificó que el 20% de la población menor de 14 años de edad no va a poder terminar la escuela primaria, y si no termina ésta ni la secundaria no va a poder ingresar al mercado de trabajo formal de ninguna manera: "Están condenados a la pobreza y no van a salir de ella salvo que haya una respuesta política muy importante". El enigma de América Latina "son los repetidos errores de las elites, la no participación de grandes sectores de la ciudadanía y concentración de poder", indicó.Vientos de cambioBernardo Kliksberg también reconoció tener una visión positiva, afirmando que en América Latina "soplan vientos de cambio", sosteniendo además que desde 1993 hasta el 2007, 14 presidentes no pudieron completar sus mandatos constitucionales, "no por golpes militares sino por la movilización del pueblo, bajo diferentes formas y contextos, pero los ciudadanos dijeron basta".Asimismo, agregó que esos vientos de cambio se están encarando bajo diferentes perspectivas nacionales y bajo una nueva visión de la economía de la sociedad, que según una encuesta realizada en 17 países latinoamericanos reclaman salud, educación y empleo. "Éstos son los tres componentes absolutamente centrales", señaló."Está creciendo la demanda por participación genuina en América Latina", sostuvo el especialista, cuyo significado es el de "nuestra revolución primaria de 1810: el pueblo quiere saber de qué se trata y quiere participar efectivamente en la toma de decisiones, y no cada tantos años en el acto electoral".Por último, Kliksberg insistió en el rol fundamental de la universidad en América Latina, que tiene que ser un actor social fundamental en una sociedad tan polarizada, donde es muy poco el sector de la población que tiene acceso al conocimiento. "La universidad tiene que generar profesionales de primera calidad en la Argentina de hoy, tiene que generar muy buenos ciudadanos, tiene que generar y potenciar una masa científica y tecnológica que sea un agente de cambio para formar una Argentina inclusiva, pero por sobre todas las cosas la universidad tiene que esforzarse por formar buena gente".Trayectoria y reconocimientoBernardo Kliksberg es Doctor en Ciencias Económicas y en Ciencias Administrativas, Licenciado en Sociología, en Administración y Contador Público. A su vez, fue autor de 43 obras y centenares de trabajos sobre diversas áreas de desarrollo y por declaración unánime del Honorable Senado de la Nación de la Argentina, se declaró de interés el conjunto de su obra científica. Asimismo, ha asesorado a más de 30 países en áreas críticas del desarrollo y se lo considera pionero de nuevos campos del pensamiento como la gerencia social, la ética para el desarrollo, el capital social y la responsabilidad social empresarial.
La Universidad Nacional del Litoral (UNL) entregó esta mañana la máxima distinción de Doctor Honoris Causa al Dr. Bernardo Kliksberg. El acto se llevó a cabo a las 11 en la sala del Consejo Superior, ocasión en la que Kliksberg también brindó la conferencia magistral que se dicta luego de recibir el máximo honor universitario bajo el título "La Misión de la Universidad en la Argentina de Hoy". "Me siento muy honrado por estar en Santa Fe, una tierra histórica para el país que tiene tanta significación y por recibir esta distinción de una Universidad que es la primera hija de la reforma universitaria de 1918", expresó Kliksberg. "Esta es una universidad que tiene un legado glorioso y que hace todos los días un trabajo de primera calidad por el país y por la gente", continuó.La distinción fue entregada por el vicerrector Amadeo Cellino quien afirmó: "Como acto institucional nos llena de orgullo, entre otros aspectos sustanciales, porque nos permite potenciar y sublimar las convicciones que animaron los aportes éticos, académicos y profesionales de una persona cuya entrega exhorta y compromete a la construcción de una civilización más justa y humanizada".Asimismo, Cellino recordó la sentencia que acompaña el efebo de la Universidad Nacional del Litoral, "luz que no se extingue", al que comparó con el espíritu que resume la obra de Kliksberg, "sobre todo porque en sus aportes se proyecta mucho más que la lucidez de un notable pensador, la riqueza diagnóstica de un intelectual de reconocida agudeza, o la impronta profesional de un emprendedor incansable: en sus desarrollos se perfilan los sueños pendientes de una humanidad que necesita superar una crisis que ahoga y ensombrece su destino".Además participaron del acto, el rector en uso de licencia Ing. Mario Barletta, el diputado nacional Hermes Binner, autoridades universitarias, provinciales y público en general..La vigencia de la Reforma del 18En su alocución, Bernardo Kliksberg comenzó recordando la gesta de la Reforma Universitaria de 1918, afirmando que se anticipó 50 años al Mayo Francés y que desde éstas tierras de América Latina y de Argentina se lanzó una serie de manifiestos a la opinión pública que implicaba abrir las puertas de la universidad, tener el gobierno universitario todos los actores de la universidad, etc. "Esto dejó una marca imborrable en la historia argentina y latinoamericana y si algo esperan de nosotros aquellos hombres es que la reinterpretemos y la apliquemos en la realidad actual", indicó.Sin embargo, el flamante Doctor Honoris Causa fundamentó que si bien muchos de los puntos centrales de la Reforma fueron llevados a cabo, lo fundamental no se cumplió: "La promesa central de abrir las puertas de la universidad no se cumplió, el desafío sigue absolutamente intacto en lo central. Lamentablemente en el año 2007, 1 de cada 100 muchachos de los sectores más pobres de la población se gradúan en la universidad". Esta situación se da en el contexto de América Latina, que según sentenció Kliksberg, constituye "la región más desigual de todo el planeta"; y que justamente pobreza y desigualdad no son entidades que funcionan disociadamente, sino que "hay pobreza porque hay desigualdad". En este sentido, ejemplificó que el 20% de la población menor de 14 años de edad no va a poder terminar la escuela primaria, y si no termina ésta ni la secundaria no va a poder ingresar al mercado de trabajo formal de ninguna manera: "Están condenados a la pobreza y no van a salir de ella salvo que haya una respuesta política muy importante". El enigma de América Latina "son los repetidos errores de las elites, la no participación de grandes sectores de la ciudadanía y concentración de poder", indicó.Vientos de cambioBernardo Kliksberg también reconoció tener una visión positiva, afirmando que en América Latina "soplan vientos de cambio", sosteniendo además que desde 1993 hasta el 2007, 14 presidentes no pudieron completar sus mandatos constitucionales, "no por golpes militares sino por la movilización del pueblo, bajo diferentes formas y contextos, pero los ciudadanos dijeron basta".Asimismo, agregó que esos vientos de cambio se están encarando bajo diferentes perspectivas nacionales y bajo una nueva visión de la economía de la sociedad, que según una encuesta realizada en 17 países latinoamericanos reclaman salud, educación y empleo. "Éstos son los tres componentes absolutamente centrales", señaló."Está creciendo la demanda por participación genuina en América Latina", sostuvo el especialista, cuyo significado es el de "nuestra revolución primaria de 1810: el pueblo quiere saber de qué se trata y quiere participar efectivamente en la toma de decisiones, y no cada tantos años en el acto electoral".Por último, Kliksberg insistió en el rol fundamental de la universidad en América Latina, que tiene que ser un actor social fundamental en una sociedad tan polarizada, donde es muy poco el sector de la población que tiene acceso al conocimiento. "La universidad tiene que generar profesionales de primera calidad en la Argentina de hoy, tiene que generar muy buenos ciudadanos, tiene que generar y potenciar una masa científica y tecnológica que sea un agente de cambio para formar una Argentina inclusiva, pero por sobre todas las cosas la universidad tiene que esforzarse por formar buena gente".Trayectoria y reconocimientoBernardo Kliksberg es Doctor en Ciencias Económicas y en Ciencias Administrativas, Licenciado en Sociología, en Administración y Contador Público. A su vez, fue autor de 43 obras y centenares de trabajos sobre diversas áreas de desarrollo y por declaración unánime del Honorable Senado de la Nación de la Argentina, se declaró de interés el conjunto de su obra científica. Asimismo, ha asesorado a más de 30 países en áreas críticas del desarrollo y se lo considera pionero de nuevos campos del pensamiento como la gerencia social, la ética para el desarrollo, el capital social y la responsabilidad social empresarial.
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