Binner entre el triunfo de octubre y la banca en el Congreso (Dario El Litoral)

El diputado electo insiste con la necesidad de recuperar la credibilidad de las instituciones. Cree en la participación de la sociedad civil en la discusión de los problemas

A mitad de camino entre el triunfo del 23 de octubre y la asunción a la banca de diputado nacional el 10 de diciembre, Hermes Binner mantiene el moderado tono de voz de la campaña y pretende profundizar lo que fueron los ejes de las propuestas del Frente Progresista, Cívico y Social. Sigue recorriendo la provincia y pasó por Santa Fe procedente de Reconquista, Romang, San Javier y Tartagal "agradeciendo a la gente la confianza que nos han tenido. Creemos en la gente, ésta ha creído en nosotros y es importante en este tiempo pos electoral inmediato agradecer la confianza. El resultado está a la vista. Hemos ganando en casi todas las ciudades y esto nos da una fortaleza hacia futuro muy importante. En las ciudades, que es donde vive la mayoría de la gente, es donde podemos recuperar mayores niveles de democracia".

Reconoce que el electorado santafesino "está esperanzado de que comencemos a cambiar. Que haya mayor transparencia, propuestas solidarias, para ir recuperando la credibilidad en las instituciones y en la política".

Binner integrará a partir del 10 de diciembre el bloque Socialista. "Nuestra intención es trabajar para unir a los representantes de Santa Fe, de la Región Centro. Hay que trabajar en forma común para que la Región, que tiene lógicas productivas comunes, siga creciendo. Es imprescindible convocar a los sectores de la sociedad civil, de la producción, del trabajo, que son los que van a ayudar para recuperar el país. La recuperación pasa por mejorar la democracia representativa pero también por invitar a la población a ser parte de la conformación. Sería útil la convocatoria a un Consejo Económico y Social que permita poner en escena los problemas fundamentales de los argentinos, de los santafesinos, y comenzar a solucionarlos en función de la participación de todos".
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En la provincia
El ex intendente de Rosario no se siente cómodo cuando lo mencionan como líder nacional de centroizquierda; parece sentirse más cómodo en la provincia. "Trabajamos en Santa Fe, los votantes son santafesinos y vamos a devolver todo nuestro esfuerzo para que la credibilidad crezca en nuestra provincia". No quiere apurar los tiempos y defiende primero la necesidad de sentarse en el cargo para el cual fue electo en octubre.

Considera esencial "la construcción de espacios comunes que permitan que la coincidencia sea el motor para unir a los argentinos. Hay muchas divisiones, sectorizaciones, que no ayudan a entender la realidad". Insta a poner los problemas concretos de la gente, como la educación, sobre la mesa.

"Yo no sé si en educación la propuesta es de centroizquierda o de centro derecha; sé que la educación es un derecho de la población y que hoy los niños que están limpiando los parabrisas de los autos no están en la escuela y son sostén del hogar. Algunos creen que esto es parte de la geografía urbana y que hay que aceptarlo como hecho de la cotidianeidad. Nosotros creemos que no debe ser así. Los niños tienen que jugar y no que trabajar. Los jóvenes tienen que tener trabajo y estudio. Construir una sociedad que piensa en el futuro es pensar qué hacemos con los niños hoy. Educar no es un hecho a cotizar en la bolsa a fin de año; educar es una propuesta hacia el futuro que tiene que ver con la universalidad de la educación y con un tiempo. Ese tiempo no está dentro del tiempo de la política o de los partidos, está en los tiempos de la sociedad. Pensar en la formación integral de nuestros niños y nuestros jóvenes nos permite también avizorar en un futuro no tan lejano mejoras para la sociedad".

Crisis de representación
En cuanto a la baja concurrencia electoral en los comicios de Santa Fe, Binner sostiene que "la crisis de credibilidad, que se da con la gravedad como fue en el 2001, es una crisis que tiene culpables. No se lo puede culpar a Pocho Leprati. Hay todo un sistema de valores, una sociedad, que viene marchando hacia la exclusión. Con tantos excluidos se generan crisis que en un momento determinado producen estallidos que desbordan todas las previsiones". Sostiene que la gente vuelve a creer cuando los representantes cumplen con su deber. "Allí comienza la recuperación. Si el poder político es cómplice de desaguisados, nada cambia. Si el poder político comienza a no ser cómplice, si fomenta el funcionamiento democrático, el respeto a la Constitución, la independencia de los poderes, la construcción de leyes que reflejen la voluntad de la gente, el respeto a las leyes, comenzaremos a transitar un camino diferente, que no es mágico. Hay que recuperar ese camino perdido y, cuanto antes comencemos a transitarlo, será mejor".

Socialistas
Desde el 10 de diciembre, el socialismo tendrá un bloque de cinco diputados, cuatro de los cuales provienen de Santa Fe y la restante es la cordobesa Laura Sesman. A Binner, se suman Eduardo Di Pollina (con mandato hasta el 2007), Silvia Ausburguer y Pablo Zancada. Este último, si bien no proviene de las filas socialistas, resolvió formar parte del bloque.

El gobierno provincial
Al momento de opinar sobre el gobierno provincial, Binner diferencia la crítica a la persona de la crítica a la gestión. Asegura no haber denostado en toda la campaña al mandatario provincial. "Sí nos diferencia el sustantivo, pensar qué se ha hecho en materia educativa, en salud, en renovación de caminos, en promocionar la pequeña y mediana empresa. Éstos son los grandes déficits que tiene la provincia y nos están desafiando, pero existen grandes posibilidades para mejorar".

Acota que "tenemos la gran responsabilidad de devolver con trabajo todo lo que demanda la población. Hay posibilidades de mejorar el estándar de vida. Hay posibilidades de obtener una convivencia entre los santafesinos". No obstante advierte que cuando la mitad de la población vive en la pobreza, es una débil democracia.

"En democracias débiles permanentemente hay conflictos que salen del marco de conflictividad que puede tener toda sociedad. La educación es un tema no resuelto y cíclicamente aparecen picos de conflictos que son como los icebergs, hay una punta que sobresale pero abajo está el gran problema. Si queremos abordar la conflictividad social que hoy tenemos, tenemos que abordar el problema de la justicia distributiva. La gente deber tener derecho y acceso a comprarle zapatillas a sus hijos o el ramo de flores a su esposa el día del cumpleaños. Estos no son lujos asiáticos sino derechos que pertenecen a una cultura que está muy incorporada a nosotros y que hemos vivido desde niños como natural. Recuperar estos vuelos culturales tiene que ser uno de los elementos fundamentales que hacen a la convivencia".

De la redacción de El Litoral