Abraham: “Una Santa Fe socialista mejorará a todo el país”

Tomás Abraham presentó un libro de Hermes Binner con elogios hacia su trayectoria política. (La Capital)

Walter Palena / La Capital

Pocas veces se lo puede ver a Hermes Binner disfrutar tanto. Eso ocurrió ayer en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia, el lugar que eligió para presentar su grueso libro de reseña parlamentaria, y la causa fue una brillante ponencia de Tomás Abraham. Su goce no fue tanto por las loas que le cantó el filósofo porteño, sino por la clase magistral de política que éste brindó sin caer en la demagogia o la alcahuetería.

Tal vez por haber leído su ponencia, su alocución perdió un poco de frescura, pero sin dejar de ser precisa y contundente. Abraham, sabiendo la composición de su auditorio, hizo un minitratado del progresismo, habló de sus falencias y virtudes, pero sobre todo condenó el pensamiento binario y maniqueo que muchas veces lo sustenta, aquel que divide el mundo entre buenos y malos, sin espacio para los matices.

Rara virtud la de Abraham: habló bien de Binner sin defenestrar a su adversario ocasional (en este caso, Rafael Bielsa). Arrancar el aplauso fácil no está en su decálogo.

“El progresismo tiene que buscar que su pensamiento sea conveniente para los electores, porque una de las cosas que definen a la oposición al gobierno (de Kirchner) es su irresponsabilidad”, dijo el filósofo ante el asentimiento general, y en particular de Binner.

Una posible decodificación de la frase podría ser la siguiente: no basta con el lamento perpetuo, con la demonización del pasado, si no se es capaz en el presente de presentar una opción real de gobierno. Presentar sólo el carné de “progre” ya no basta para ganar una elección. “Criticar al menemismo es hornear pan barato”, graficó.

Luego se metió en un terreno espinoso: la soterrada interna socialista y lo hizo en un ámbito repleto de socialistas, lo que le aportó mayor honestidad intelectual.

“Desde mi posición de extrapartidario, ver que otros miembros del Partido Socialista desperdician sus energías en las internas facciosas, es no haber entendido nada el mensaje”, dijo, y sin mencionarlo, se refirió al caso de Jorge Rivas, un dirigente del socialismo porteño que se pasó recientemente al kirchnerismo. “Se alían con montoneros caducos, sacan pasajes al estrellato, pero no el de la fama”, completó.

Para el final, dejó los elogios directos. Dijo que Binner lo atrae políticamente porque es un hombre razonable y abierto a los cambios del mundo. Y hasta puso su eventual triunfo como un hito argentino: “Una Santa Fe socialista, sin dudas, mejorará a todo el país”.